viernes, 28 de septiembre de 2007

Pequeños indicios



Bueno, ahora que sabemos lo que los hombres quieren de nosotras, pasamos a ver lo que nosotras esperamos de ellos, mejor dicho, lo que no esperamos. Esas pequeñas señales, que si estás atenta al principio de la relación, te pueden decir desde el principio si ese hombre te conviene o no. Las he resumido en 10 puntos:

1. Te llama ¡Tonta! ¡Zorra! ¡Gorda! o cualquier cosa por el estilo, ya sea en serio o en plan de cachondearse, no contigo sino de ti y a ti te molesta. No importa que sea cierto o no, a ver a santo de qué tenemos que ser inteligentes, vírgenes o flacas. No, no te conviene.
2. Te pega, te aostia con saña, te pone un ojo morado etc... en plan educativo, para que aprendas. Si no eres aplicada o buena estudiante, déjalo. Si no te interesa la carrera que ha elegido para ti - suele pasar - déjalo también. Enseguida.
3. Te amenaza, te da miedo, como la tele y los periódicos... Si no es capaz de hacerte sentir bien que se apunte a un cursillo ¿qué tendrás que pagarlo tú? ¡No te conviene!
4. Antepone sus propios intereses siempre a los tuyos. Catik, te engaña, su amante favorito: él mismo. Si no te gusta compartir, déjalo.
5. Está muy bueno y le gustan todas las mujeres. Si lo que te gusta son amantes creativos, no te conviene (habla la voz de la experiencia)... a no ser que te guste el sexo en grupo, no simultáneo (¿Cabe eso dentro de la creatividad?) ¿Tanta experiencia y no aprenden nada?!! No te conviene.
6. Si te repugna tanto que no estarías con él ni 5 minutos seguidos ni harías el amor aunque te pagasen 30 millones de euros (pero de verdad ¿alguien paga eso?). No te conviene, da igual que sea un chico estupendo. (?)
Si tienes que pagarle 30 millones, tampoco te conviene, económicamente hablando.
7. Te echa drogas en la bebida cuando no miras para ponerte a tono. A mí, por lo menos, me gusta verlo todo. No te conviene.
8. Te pone a trabajar en la calle y él se va de copas. Te ofrece a sus amigos y no es esquimal. En fin, está tomando decisiones que sólo te corresponden a ti. Yo, creo que no te conviene.
9. Su película preferida es la Naranja Mecánica y su ídolo C. Manson. ¡Qué casualidad! Si no eres campeona de los 100 m. lisos, no te conviene ni para entrenarte.
10. Resumiendo, si no te gusta, no te conviene y si te gusta tampoco, me temo. Recordad que el gusto es un sentido completo, que sea divertido no significa que te guste, que esté disponible no significa que te guste, que dé su opinión sobre ti no significa que sea cierta y tampoco que te guste. Que le gustes no es lo mismo que que te guste y viceversa, que no le gustes, no es lo mismo que te guste. Que le gustes a un caballo no significa que seas un caballo, lo mismo que si se te engancha un perro a la pierna no es sinónimo de que seas una linda perrita. Tranquila. Si lo único que te ata a él es tu orgullo herido, queriendo demostrarle lo que vales ¡no te conviene!!! En absoluto.
Recuerda también: si lo miras desde abajo, tampoco es que te hayas agachado, tal vez él va sobre zancos, fácil hacerlo caer pero innecesario pues le estarías dando motivos para cabrearse, todo hay que decirlo. En cualquier caso, difícil postura para hacer el amor. En fin, si no te gusta, no te gusta y no te conviene.
Resumiendo: si tiene evidentes tendencias sádicas, es escurridizo, divertido, tiene hijos pero no le gustan los tuyos, le da a la coca, está muy probablemente casado, te acosa sin descanso, te insulta... no es tu papá jugando a los reyes magos. ¡No te conviene! Es más, si se acerca a menos de 100 m ¡denúncialo!